Rehabilitación de la Casa de Juan Paje

El proyecto parte de un concurso de ideas convocado en 2002 del que esta propuesta resulta ganadora y la actuación se enmarca dentro del programa de rehabilitación del casco histórico de Cádiz que la Empresa Publica de Suelo de Andalucía lleva desde su Oficina de Rehabilitación en esta ciudad.

La casa objeto de actuación se localiza en el barrio de San Juan, muy cerca de la catedral, en la calle Obispo Urquinaona y comprende un conjunto de inmuebles al que se denomina Casa de Juan Paje. Se denomina así porque desde sus principios se encuentra vinculada a la familia de los Paxe, regidores de la ciudad, siendo la primera datación histórica que se tiene de ella del siglo XVII, en concreto del año 1647.

Lo que se entiende por «casa» es en realidad el resultado de una agregación, de un solapamiento en el tiempo de parcelas y volúmenes que poco a poco colmatan esta zona de la trama del casco. Trama que por otra parte, como en casi todo el centro histórico, ha permanecido prácticamente invariable en el tiempo (reflejándose la morfología actual en la famosa maqueta de la ciudad de Carlos III) y siendo la única operación de importancia que se realiza la del vaciado de la catedral.

Situación en el casco histórico de Cádiz

 

En el estado previo a la intervención o a la proposición del concurso, se accedía a la casa por cinco puertas independientes, que van de los números 19 a 27 de la calle Obispo Urquinaona. Cada uno de estos accesos suponía un registro diferente al interior de la casa tanto en profundidad como respecto a la altura de planta a la que se llegaba. La saturación de las crujías había llegado a ser tal que deformaba incluso la capacidad para acceder y salir de la finca y por supuesto el entendimiento general de funcionamiento de las secuencias de los patios y circulaciones como parte de un mismo conjunto, no sólo desde un punto de vista material, tectónico, sino incluso fenomenológico. La finca presentaba además un estado muy avanzado de deterioro.

Fotografías del estado primitivo

Realmente, lo más característico de la casa, del modelo que la fue conformando a lo largo del tiempo, es su funcionamiento como “casa de cuartos”, es decir mediante habitaciones a veces independientes que se podían arrendar y habitar comunicándolas según las necesidades. Un habitar como por retales, modelo que se deriva no tanto de una secuencia tipológica como de las necesidades de un tejido social, que en la época de formación de la casa era muy heterogéneo, cosmopolita, gremial, fruto de las condiciones del Cádiz de entonces. Un siglo XVIII, de oro respecto a la vida y esplendor comercial de la ciudad y que entre otras cosas induce un aporte poblacional ingente.

Así, la casa fue colmatando a lo largo del tiempo la parcela. En un principio puede parece que la banda o crujía derecha de toda la parcela pudiera ser un acceso o calle que registraba dicha parcela hasta el fondo. Poco a poco se colmata en función de las demandas poblacionales la 3ª casa, se densifica la 2ª y se ocupa también de forma total la crujía derecha. Finalmente, el último escalón posible es el relleno de aquellos espacios libres entre edificación que procuraban ventilación e iluminación, obligando a la ventilación en numerosos puntos de la casa de patios o mas bien pozos de ventilación de no mas de 80 cm. o 1m. de ancho y 5 plantas de altura.

Sólo a través de las secciones del estado primitivo puede observarse con más claridad la estructura en tres patios de la casa, uno primero principal de menor tamaño al que se accede desde la tradicional casapuerta y otros dos patios posteriores a los que se llega desde diferentes entradas según la planta a la que queramos acceder.

En el concurso se proponía explícitamente la necesidad del cumplimiento de un programa funcional muy exhaustivo y específico que -literalmente- pedía:

1 vivienda de 1 dormitorio, ubicada en planta baja, el baño dispondrá de placa de ducha.

12 viviendas de 2 dormitorios:

2 ubicadas en planta baja, el baño dispondrá de placa de ducha

2 ubicadas en planta primera, el baño dispondrá de placa de ducha

3 ubicadas en cualquier planta, el segundo dormitorio será doble.

6 viviendas de 3 dormitorios:

2 ubicadas en planta 1ª, el baño dispondrá de placa de ducha

1 ubicada en cualquier planta, el segundo y tercer dormitorio serán dobles

2 viviendas de 4 dormitorios:

1 ubicada en cualquier planta, el segundo y tercer dormitorio serán dobles.

Maqueta del concurso

Detrás de esta complicación y precisión en la descripción del programa demandado no está solamente el afán programático del cumplimiento de una serie de necesidades o requisitos mínimos. Hay algo más que se va desvelando, y que es el entendimiento de que en Cádiz, en su casco histórico, se teje una compleja trama, el reflejo de la enmarañada urdimbre de vidas y familias concretas, el reflejo de cada una de sus necesidades, de sus relaciones. La ciudad se organiza con un modo de vivir y de habitar que más que construirse, va tejiéndose y destejiéndose en el tiempo tanto como en el lugar: las casas -como las vidas- se cruzan unas con otras, se remontan entre si, se viven por partes, por cuartos, por temporadas. Casas que se apilan como los cuerpos, que buscan la luz, respirar, asomándose a las azoteas. Habitantes que (pre)sienten que su casa no es sólo una delimitación catastral, que lo es también la casapuerta en la que se reúnen, el patio en el que charlan, el recorrido que cada día realizan.

Por eso, vemos un paisaje urbano de naturaleza mas corpórea que tectónica, mas relacional que físico. Un paisaje de relaciones de personas, recorridos y estancias. Las necesidades, por tanto, en el proyecto no pudieron verse reducidas a un encaje de parámetros mínimos, dictados desde una posición estrictamente disciplinar. El proyecto ha de ser el lugar donde se acuerdan los intereses y los movimientos cruzados de sus habitantes.

Desde este punto de vista, en el proyecto de rehabilitación, las típicas yuxtaposiciones que se plantean del tipo conservado-añadido, argumentadas desde una posición exclusivamente disciplinar e histórica, empiezan a desdibujarse, a perder su sentido. Conscientes de lo que constituye el verdadero paisaje urbano, nos situamos más allá de la discusión de si se mantiene o no la fachada, tal o cual patio. La propuesta se genera por encima de esas consideraciones aunque teniéndolas en cuenta y el proyecto, más que construirse, se desvela, en el encuentro, en la negociación de dos realidades: la de una serie de preexistencias (tectónicas, vacíos, recorridos..) y la de las necesidades de los habitantes.

Plantas baja y primera del estado reformado
Estado reformado. Sección longitudinal por la secuencia de patios

En el proyecto de rehabilitación de la Casa de Juan Paje, las viviendas se disponen zigzagueando entre las crujías, sustituyendo al hacinamiento original y procurando un esponjamiento del que carecía el conjunto. De este modo se procura la necesaria ventilación e iluminación entre los macizos ocupados por las viviendas, sin renunciar por ello al sistema que conforma la casa a partir de una serie de crujías paralelas a fachada ni a la secuencia de patios que articula este modelo urbano. Se intenta especialmente no desposeer a la edificación de su carácter transitable, público, y se evita privatizar los patios, maniobra usual en numerosas rehabilitaciones pero que, a nuestro entender, acaba con el carácter y la importancia del recorrido y de las relaciones propias de estos modelos.

Se mantiene, por tanto, la mayor parte de los muros portantes paralelos a fachada, reinterpretados como elementos de una potencia suficiente como para poder ser estructuradores del proyecto y no sólo condicionantes tectónicos. La secuencia de los patios también es reelaborada en la propuesta, y aunque su estructura fundamental se mantiene, se proponen nuevas permeabilidades, nuevas veladuras y nuevos vacíos, accesos y penetraciones. Éstas se articulan ahora a partir de la apertura de la banda o crujía perpendicular a fachada en el lado derecho del inmueble, entrada y discurrir natural, en el pasado, de las viviendas del fondo de la parcela.

 

 

 

 

Obra: Rehabilitación de la Casa de Juan Paje

Situación: Cádiz

Fin de Obra: 27 octubre 2008

Arquitecto: José Luis Bezos Alonso

Arquitecto Técnico: Antonio Cornejo Flores

Promotor. Oficina de Rehabilitación del Casco Histórico de Cádiz. Empresa Pública de Suelo de Andalucía.

Constructor: Rayet Construcción S.A.

Fotografías: José Luis Bezos Alonso